Debido a la caída del precio internacional del sorgo, la Secretaría de Desarrollo Rural de Tamaulipas está promoviendo la instalación de una planta de biocombustible que, además de generar energía limpia, permitiría a los productores del norte del estado obtener un precio más rentable por su grano.
El secretario Antonio Varela Flores detalló que entre 2024 y 2025 los agricultores han enfrentado pérdidas significativas, mientras que la producción se redujo de 3.6 millones de toneladas en 2015 a 2.2 millones en 2022, pese a que el estado representa el 57.5 % de la producción nacional de sorgo. La planta se considera un proyecto eminentemente social.
Además de mejorar la rentabilidad, la planta generará empleos y contribuirá al cumplimiento de los compromisos ambientales de México al producir etanol en una primera fase y, en el futuro, bioturbosina.

